Líquidos de mantenimiento
Líquidos de mantenimiento para lentillas
Tenemos disponible una amplia variedad de líquidos de mantenimiento para lentillas. Podrá encontrar el líquido adecuado para que sus lentillas estén en correcto estado durante todo el día.
Consulta todos nuestros productos a continuación:
El proceso de higiene consta de los siguientes puntos:
• Humectación: humedecer la superficie de la lentilla.
• Limpieza: los depósitos pueden eliminarse de forma mecánica, o a través de iones o enzimas.
• Desinfección: reducción de la colonia de gérmenes
• Conservación: almacenamiento de las lentes de contacto en el estuche provisto para tal efecto.
Consejos para facilitar la higiene de las lentes de contacto e incrementar su comodidad:
• Lavarse bien las manos antes de manipular las lentes de contacto.
• Guardar siempre las lentes de contacto en una solución de conservación especial para lentillas.
• No mezclar nunca las distintas soluciones para el cuidado de lentes de contacto, a menos que esté indicado de forma expresa que pueden emplearse conjuntamente.
• No utilizar agua corriente para aclarar las lentillas.
• Igual de importante que la higiene de las lentes de contacto es la higiene del estuche en el que se almacenan; por tanto, éste debería también desinfectarse y reemplazarse periódicamente.
• Humedecer con más frecuencia las lentillas una vez puestas (lágrima artificial).
Mantenimiento y conservación de lentillas
Conservación: Las lentillas de más de un uso deben limpiarse y desinfectarse siguiendo estrictamente las instrucciones que aparecen en el frasco de solución limpiadora, o siguiendo los consejos de su adaptador. Por lo general las lentes de contacto pueden conservarse en soluciones únicas durante varias semanas sin que su poder desinfectante disminuya en modo alguno. Las lentillas pueden extraerse de su estuche de conservación y colocarse directamente en los ojos. Por consiguiente, si han permanecido guardadas en el estuche durante un largo periodo de tiempo, antes de colocarlas en los ojos es preciso volver a desinfectarlas con solución única o peróxido nueva (léanse las instrucciones de uso del producto). En el caso de lentillas desechables diarias solamente deben ser utilizadas una vez no procediendo a desinfección o limpieza de las mismas ya que estas lentes están diseñadas para un solo uso.
Soluciones únicas: Surgieron a raíz de la necesidad de sistemas más sencillos de utilizar. Su presencia se ha impuesto en el mercado desde finales de la década de los 80. Se trata de soluciones fáciles y prácticas de usar y, al mismo tiempo, proporcionan seguridad y eficacia. Permiten limpiar, desinfectar, aclarar, conservar y humedecer las lentillas mediante el empleo de una sola botella. Por lo general las lentes de contacto pueden conservarse en soluciones únicas hasta un máximo de 30 días. Este tipo de soluciones suelen ser más económicas que las de peróxido.
Soluciones únicas de primera generación: Se trata de soluciones fáciles y prácticas de usar, ya que no es preciso que se lleve a cabo ningún proceso de neutralización. Sin embargo, en estos sistemas, para limpiar las lentillas debe realizarse un paso manual, que consiste en limpiarlas y aclararlas con los dedos antes de colocarlas (frotar y aclarar). Mediante este procedimiento se reduce el número de gérmenes y se elimina una parte considerable de los depósitos. Tras el aclarado, las lentes deben desinfectarse, introduciéndolas en un estuche que contiene la solución correspondiente (el tiempo mínimo de desinfección suele ser de entre 4 y 6 horas).
Soluciones únicas de segunda generación: Las soluciones únicas de segunda generación que existen actualmente en el mercado son las más prácticas de utilizar. Su formulación se ha optimizado de tal forma que puede prescindirse del procedimiento de limpieza mecánico. Ello es posible porque el poder limpiador y desinfectante de estas soluciones se ha incrementado con respecto a las de primera generación.
Sistemas de peróxidos (desinfección oxidativa): Los peróxidos se componen de una botella con solución de peróxido al 3% y un componente neutralizante. Este último está disponible en pastilla o en solución. El peróxido de hidrógeno al 3% destruye bacterias y hongos en un tiempo de acción aproximado de entre 20 y 40 minutos. El peróxido oxida las moléculas y componentes celulares, mediante el oxígeno atómico de alto poder activo que se forma a partir de la descomposición del peróxido, y los disuelve. Las lentes de contacto sólo deberán colocarse en los ojos una vez haya tenido lugar la neutralización y las lentes de contacto se hayan aclarado con solución única o solución salina.
Limpieza enzimática: Por lo general se presentan en forma de pastillas, que deben utilizarse una vez por semana. Muchos de los productos más vendidos del mercado permiten la posibilidad de combinar la desinfección y la limpieza enzimática.